1 de diciembre de 2016

“La principal innovación es poner el foco sobre la convivencia y hacer de ella un objeto de aprendizaje”

Juan de Vicente es profesor y orientador en el IES Miguel Catalán (Coslada) y fue el ganador, a principios de este año, del Certamen D+I al docente más innovador de España. Hablamos con él para saber más acerca de su experiencia en el certamen y sobre su trayectoria y puntos de vista.

Hemos sabido que la idea de participar en este certamen no fue tuya, sino que te empujaron a hacerlo. Cuéntanos quién fue y por qué.
Inicialmente yo no tenía intención de presentarme al certamen porque es un concurso individual y mi filosofía es de trabajo en equipo, de crear redes de personas que trabajan en torno a proyectos. Pero alguien presentó la solicitud por mí y fueron los profesores y los alumnos los que hicieron el vídeo de la candidatura. Al final, me convenció la idea de poder visibilizar el trabajo que hacemos, el trabajo de mucha gente, y di el visto bueno.

El certamen tuvo mucha participación. ¿Qué crees que diferenció a tu candidatura para hacerte ganador?
Creo que había muchos candidatos que también podrían haber ganado. Quizás hubo algo singular en mi candidatura y es esa idea de trabajo en equipo, de gente muy conectada con el entorno. En el vídeo de mi candidatura yo prácticamente no aparezco. Más que un profesor en su aula, hemos destacado las redes de trabajo, el trabajo en equipo, el liderazgo… Muchos elementos que quizás el jurado estimó que ofrecen una idea de la innovación transformadora.

¿En qué ha cambiado tu vida desde que te nombraron el “docente más innovador de España”?
Prácticamente en nada. Venimos haciendo este trabajo hace mucho tiempo. Yo me he sentido muy reconocido. He tenido muchas ofertas para colaborar con editoriales, en cursos, en ponencias…. Y hay muchos compañeros que están siendo invitados a actos para presentar los trabajos. Quizás el mayor cambio ha sido para el centro, pues ahora tiene más visibilidad y hay un mayor interés de la comunidad educativa y de los medios de comunicación hacia él. Pero a nivel personal no he cambiado nada. 

Eres un especialista en resolución de conflictos. ¿Cuáles son los más habituales que se producen en las escuelas?
En todas las escuelas hay conflictos, porque estos son inherentes a las relaciones humanas. Mi trabajo ha sido desarrollar estructuras y sistemas para fomentar la participación del alumnado y hacer corresponsable a toda la comunidad en la intervención ante los conflictos. Tenemos sistemas participativos muy eficaces para detectar el acoso desde el minuto uno y que no evolucione. También entrenamos a los chicos en habilidades sociales, en inteligencia emocional… Posiblemente tenemos los mismos conflictos que en todos los sitios, pero nosotros sabemos hacer de ellos una oportunidad para aprender. Quizás la principal innovación es poner el foco sobre la convivencia y hacer de ella un objeto de aprendizaje para que sea el alumnado el que aprendiendo de los propios conflictos pueda desarrollar competencias para afrontarlos. 

¿Cómo deben abordar estos conflictos los profesores?
El principal consejo es poner el foco sobre la convivencia. Que la tomen como algo de máxima prioridad y que ofrezcan recursos para que se pueda trabajar desde el centro. Que se pueda aprender de cualquier situación; que se aprenda a resolver conflictos, a mediar, a ser más empático para ponerse en el lugar del otro, a expresar los sentimientos para comprender y poder relacionarse mejor con los demás, para proteger a los demás, para ofrecer oportunidades para el crecimiento moral, para comprender que si ves una injusticia y no intentas resolverla eres cómplice de esa injusticia… Todo eso debe ser objeto de trabajo en las escuelas. Si es así los problemas que puedan haber no llegan a situaciones graves y son una fuente de aprendizaje. 

Uno de los principales problemas en las escuelas son los casos de acoso. ¿Qué aconsejas hacer ante estas situaciones?
No es el principal problema, quizás sea el más mediático. Los problemas principales vienen derivados de las relaciones humanas y son conflictos normales. El acoso es más llamativo y más grave, aunque estadísticamente no es tan relevante. Quien quiera abordar el acoso debe contar con la participación del alumnado. En un caso de acoso hay tres elementos: los agresores, las víctimas y los espectadores. La psicología social predijo hace mucho tiempo que los espectadores tienden a ser pasivos. Las escuelas deben trabajar para que esos espectadores sean activos, para que detecten estas situaciones e informen desde un inicio, ayudando así a evitar que el acoso evolucione y sea grave. Siempre va a haber relaciones de dominio y sumisión en cualquier escuela. Los nórdicos dicen que no existe el acoso cero. La diferencia la marcará quien pueda detectarlo desde el principio, pueda intervenir para romper la dinámica de dominio-sumisión y crear relaciones más sanas. En otros casos no se detectarán, no se trabajarán y llevarán a situaciones de acoso que cuando se descubren al cabo de meses son mucho más difíciles de superar.

Con tu experiencia… ¿Has detectado algún patrón que se repita en alumnos conflictivos o rebeldes?
Hay alumnos que tienen experiencias de fracaso escolar, que no tienen la oportunidad de tener una familia con la que aprender la moral sobre lo que está bien o no… Hay mucha diversidad. La escuela debe tener un papel compensador de esas diferencias. No todos los niños están en la misma línea de salida cuando empieza el curso en cuanto a su capacidad para reflexionar moralmente, su empatía o su capacidad para asumir unas normas. Pero la escuela debe tener ese papel con todo el alumnado. A partir de las situaciones que se van produciendo y de manera preventiva tenemos que ir trabajando en este sentido. Hay que hacer de eso un contenido porque es muy importante para el crecimiento de las personas. No es tanto un tema de inteligencia. Hitler era muy inteligente pero quizás su nivel de reflexión moral o su capacidad para comprender las diferencias o para empatizar con el sufrimiento era muy baja.

Los chicos tienen dificultades para ponerse en el lugar del otro, para pensar en una estrategia que no sea pegar cuando tienen un problema, pero eso se puede trabajar y necesitamos apoyo institucional para que las escuelas puedan hacerlo y sea una prioridad.

En vuestro centro realizáis proyectos de aprendizaje y servicio. ¿Nos puedes explicar vuestra experiencia y poner algunos ejemplos?
Llevamos muchos años haciendo proyectos de aprendizaje y servicio que vinculan las asignaturas con necesidades sociales del entorno. Por ejemplo, si en la asignatura de Biología están estudiando el sistema circulatorio, la sangre y los trasplantes (parte del temario en 3º de la ESO), acompañamos ese estudio con una necesidad social como es la donación de sangre. Los alumnos no pueden donar porque son menores de 18 años pero sí pueden organizar una campaña de donación de sangre. Esto lo hemos hecho durante tres años (este será el cuarto), y hemos conseguido triplicar el suelo de donantes en la localidad de Coslada y multiplicar por tres el número de primeros donantes, algo que no consiguen otras campañas y maratones de donación de sangre. Este logro, esta necesidad social que se cubre con un proyecto, hace muchísimo más interesante la asignatura y motiva muchísimo al alumnado porque les transmite la idea de que pueden transformar su entorno. Como este, tenemos 20 proyectos al año en diferentes asignaturas vinculados a necesidades sociales. 

Eres un firme defensor del aprendizaje por proyectos y cada vez son más los centros que lo aplican. ¿Crees que se acabará imponiendo este modelo?
Es algo bastante atractivo y moviliza muchísimo al alumnado. Dispara su motivación y su interés por las materias. Es verdad que choca con un modelo más tradicional o una evaluación demasiado centrada en contenidos que impide en ocasiones trabajar de esta manera. Pero es indudable que es un modelo que funciona y nosotros nos sentimos muy cómodos trabajando con proyectos, especialmente cuando tienen una proyección social y ayudan a satisfacer necesidades de nuestro entorno.

¿Te ha resultado útil este contenido?

Puntúalo con estrellas

Puntuación media 0 / 5. Recuento de votos: 0

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.

Comparte este artículo

1 comentario

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos destacados

×ATENCIÓ: Cookies no configurades en l'idioma actual. Revisa la teva configuració al plugin, gràcies!
¡Un insta para profes!

Síguenos en Instagram para acceder a sorteos exclusivos, recursos educativos, consejos para profesores y estudiantes, tutoriales DIY y mucho más.